Como ya indicamos en la entrada anterior el periodo finisecular marca el apogeo de Adrián Cayol como productor de cerveza. Su expansión le llevará a la ciudad de Alicante, viaje que, a pesar de la cercanía, suponía en aquellos años varias horas por un entorno bastante montañoso.
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| Fuente alitotal.com |
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La ciudad había crecido en torno al puerto y en 1900 alcanzaba los 50.000 habitantes. En 1886 ya distribuían su cerveza los hermanos Cayol desde la antigua fábrica de gaseosas La Alicantina, propiedad de José María Coma, situada en la calle Jorge Juan 37.
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| La Unión Democràtica, 13. 03. 1886. |
Las ventas debieron ser suficientes para establecer una sucursal en la ciudad alicantina en 1897. La sede se situó en Alfonso X el Sabio nº 7, muy cerca de la estación del ferrocarril. Su representante fue Rafael Cortés y en el citado año informa al público de que las gaseosas y cervezas que se vendían en la plaza de toros no eran de Cayol al no haberse mantenido la concesión de venta de bebidas en el coso de años anteriores. Rafael Cortés es una persona relacionada con la distribución, en 1897 era representante del sevillano café Glandario y en 1898 aparece como propietario de una fábrica de gaseosas, posiblemente correspondiente a la sucursal de Cayol pues no tiene mucho sentido que vendiera gaseosa de Cayol y además fabricase la suya propia.
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| La Correspondencia Alicantina, 20.02.1898 |
Por lo que podemos extraer de los numerosos anuncios con los que inundó la prensa local en aquellos años (más de 200 en tres años) la cerveza se servía desde Valencia diariamente, por lo que debieron usar el ferrocarril y, con toda probabilidad la enviaban en barriles. Es posible que después se envasase en botellas. Un anuncio del 13 de junio de 1898 habla de la sucursar como "fábrica".
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| La Correspondencia Alicantina. |
La cerveza también se expedía en varias cafeterías de la ciudad y se insistía mucho en sus propiedades médicas.
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| La Correspondecia Alicantina, 04.12.1897. |
El último anuncio de Cayol data de junio de 1899, por lo que es posible que poco después, pasado el verano, cesase la actividad de la sucursal de Cayol en Alicante, quizá debido a la enfermerdad de Adrián o a la falta de ventas.
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