La historia de Cervezas de Santander ya ha sido desarrollada en una entrada anterior, su expansión fuera del ámbito cántabro demostraba la importancia creciente del mercado nacional como motor de las ventas, en sustitución de los mercado americanos. Ya en 1912 se dio el salto a Valladolid, con la compra de S. Juan a la compañía Matossi y en 1920 culminó la integración de La Austriaca, naciendo la empresa "Cervezas de Santander". La expansión continuó en 1922 con la compra de La Gaditana de Cádiz y en 1924 La Leonesa en Trobajos del Camino.
Etiqueta de 1927 de Cervezas de Santander. |
Fruto de esta nueva política, impulsada por Manuel Prieto Lavín, fue la construcción de una nueva fábrica en Vigo. La ciudad había experimentado un auge económico importante gracias a la emigración, por un lado era un punto de salida importante hacia América, por otro el retorno de indianos enriquecidos favoreció las inversiones industriales. Ya desde el siglo XVIII existían industrias de salazones que se transformarán en modernas conserveras y también se desarrollán los astilleros desde fines del XIX, ambas industrias emplearon abundante mano de obra y actuaron como un imán sobre las zonas rurales, que encontraron una alternativa a la tradicional emigración a América. El auge demográfico permitió a la ciudad pasar de 53.614 habitantes en 1920 a 65.983 en 1930, crecimiento que no se interrumpió durante todo el siglo XX.
Calle de Colón, circa 1920. |
La tradición cervecera en Galicia se circunscribía, según nuestros datos, a la ciudad de la Coruña: En 1890 ya existía un productor local llamado Manuel Serrano, en 1900 apareció la empresa Casado Hermanos y Cía y finalmente en 1906 inició su actividad la marca "Estrella de Galicia" bajo el impulso de José María Rivera Corral. En Vigo la primera fábrica conocida será "A Barxa", aunque durante algunos años debió competir con al menos dos productures locales: Moreiras y Cía. y García Bañón, Fábrica de Cerveza.
Las obras de La Barxa se iniciaron en 1922 con un proyecto del arquitecto local Manuel Gómez Román. Un autor regionalista, pero que buscaba imprimir un carácter contemporáneo a sus obras. Se ha llegado a hablar de un "gallegismo arquitectónico" que buscaba su fuente de inspiración en Santiago de Compostela. No dispongo de los planos de la fábrica, pero el lector podrá comprobar en la fotografía una obra inspirada en la arquitectura gallega, monumental, con un importante peso de la piedra en la articulación de la fachada.
La fábrica de "A Barxa" en sus primeros años. |
La inauguración de la fábrica se produjo el 29 de enero de 1925. Empezó produciendo las marcas La Cruz Blanca y La Austriaca, del tipo doble bock, triple bock y Múnich, se abastecía de agua procedente de tres pozos cercanos y el propio Manuel Prieto Lavín participó en su inauguración. "A Barxa" se instaló en la Avenida García de Barbón 72, cerca del puerto, ocupaba una extensión cercana a los 10.000 m² de los cuales se edificaron casi la mitad. La buena acogida del mercado les llevó a un puesto de liderazgo durante 1925 y 1935, por encima de La Estrella de Galicia.
Dentro del grupo "Cervezas de Santander" era una fábrica relativamente pequeña. En 1970 se empezó a producir la marca Skol en Vigo y La Cruz Blanca fue perdiendo gradualmente importancia.
Anuncio de 1935. |
Image publicitaria de los años 50. |
En 1979 este grupo clausuró la factoría vallisoletana, al no poder adaptarse a la producción de Skol, pronto seguida por Santander, Vigo resistió aún 10 años más, fabricando Skol bajo la dirección de José Luis Rodríguez. En 1980 su producción era de 146.000 hectolitros, la menor de todas las fábricas del grupo. Ya en esa época La Cruz Blanca solo se comercializaba en Santander, Valladolid y Cádiz.
El cierre definitivo de la fábrica se produjo en 1989, se adujo que no era rentable realizar nuevas inversiones en Vigo que garantizasen la calidad de la producción, y tras indemnizaciones, traslados y jubilaciones se puso final a 65 años de historia. Pronto la especulación se cernió sobre la cervecera y tras algunos problemas entre propietarios y ayuntamiento, se procedió al derribo y se conservó la zona verde, el murete y, sobre él, la antigua verja, desapareciendo una importante muestra de nuestra arquitectura industrial para alzar las actuales torres del Club Financiero.
Bibliografía:
No hay comentarios:
Publicar un comentario